Nacionalidad: Mejía
Grado académico: Licenciatura en Administración de Empresas
2992-7293
El Sector Agropecuario mexicano es el sector con más áreas de oportunidad en términos económicos, con un mercado de más de 120 millones de habitantes que a diario en el desayuno, comida y cena consumen los productos que salen del campo mexicano ya sean de origen animal o vegetal.
No es secreto que la producción agropecuaria es señalada como una de las principales responsables del cambio climático, la escasez del agua y la contaminación del suelo y el aire, etc.; ya que en muchos lugares del mundo se siguen tomando tierras para la producción de alimentos destinados al mercado global, el esfuerzo del hombre por cubrir las necesidades alimentarias de la población mundial nos ha llevado a perder ecosistemas importantes y poner en riesgo otros tantos a nivel global, hoy sabemos que el planeta no puede perder más tierras para producir alimentos lo que nos lleva a replantear los sistemas de producción actuales para aprovechar al máximo la capacidad instalada disponible y así alcanzar la meta que traza ONU a través de la FAO de cara al año 2030 y 2050, este último estimándose que la población mundial aumente al menos en 2 mil millones de personas más en el mundo.
La humanidad no se puede concebir sin el descubrimiento de la agricultura por lo tanto su futuro hoy depende del desarrollo de tecnología que permita a todas las personas del mundo tener acceso a alimentos sanos y de calidad para su subsistencia.
Con lo anterior citamos un dicho popular entre las personas dedicadas a la ganadería “PARA SER UN GANADERO EXITOSO, PRIMERO HAY QUE SER UN BUEN AGRICULTOR”, esta afirmación no excluye a ningún ganadero ni a ningún sistema de producción ganadero más bien nos recuerda que la agricultura es la madre de nuestra civilización hasta nuestros días.
Hoy en día, México es el principal importador del Maíz que se produce en USA para cubrir la demanda del mercado de la tortilla y el mercado del ganado, en 2021 México reporto un record histórico en importaciones de granos, para lo que va de 2022 no hay grandes diferencias a este comportamiento del año pasado y con los impactos inflacionarios derivados de los conflictos bélicos sumados a los efectos del cambio climático la tendencia pone en un estado incierto al futuro de la ganadería en México.
La apertura de fronteras con “0” aranceles no va a mitigar los efectos de la inflación en la economía, la entrada de carne subsidiada de otros países complica aún más la situación de los productores mexicanos, la alternativa de importar leche en polvo es otra amenaza para la producción lechera y podemos enumerar más productos y eso no nos cambiaría la perspectiva sobre el presente y futuro del sector Agropecuario del país, a lo que nos truje…
El inventario nacional de ganado bovino es de casi 36 millones de cabezas, siendo 2,642,516 cabezas para ganado lechero y 33,356,369 cabezas para ganado de carne, siendo los estados con más inventario de ganado Jalisco, Veracruz, San Luis Potosí, Chihuahua, Durango, Sonora para ganado de carne y repiten Jalisco dentro del top de productores lecheros junto con la región lagunera como la cuenca lechera más importante de México.
Los ganaderos mexicanos a lo largo y ancho del país, históricamente han invertido en genética que los ayude a mejorar la calidad del ganado para hacer esta actividad cada vez más competitiva para la producción, el país posee todos climas por lo tanto se estima que al menos hay 30 razas bovinas distribuidas de acuerdo a las características raciales específicas para cada clima.
Tenemos ecosistemas dentro de cada región del país, unos más frágiles que otros de acuerdo a la biodiversidad que habita en ellos, de ahí que hoy en día no solo está en riesgo la actividad ganadera si no también todas las especies que dependen de los recursos que hay en cada región natural del país.
Buscando una alternativa que permitiera producir más con menos a nivel de sistemas de pastoreo surgió la filosofía de la ganadería regenerativa, que promueve el uso racional de los recursos de disponibles en los ecosistemas a fin de hacer más eficiente el manejo de los rebaños desde aspectos reproductivos hasta condiciones de rotación del pastoreo para favorecer la regeneración del suelo y al final de cada ciclo tener mayor rentabilidad que dicho sea de paso está sujeta a la cosecha anual de becerros.
El mercado de la carne de bovino en el país, es cada vez más exigente al momento de definir qué tipo de ganado es el más rentable al momento de llegar al frigorífico o las carnicerías de los pueblos, como vemos en las cifras del inventario nacional bovino el ganado de carne representa el 93% del total del mismo, este mercado sigue aumentando puesto que también tenemos operaciones de exportación de ganado en pie principalmente a nuestro vecino del norte.
Esta condición si genera una amenaza al ecosistema pues sin capacitación ni regulación corremos el riesgo de que se tomen más hectáreas de tierra para el pastoreo de ganado con la justificante de la demanda del mercado.
Los grandes corporativos nacionales dedicados a la producción de carne en grandes complejos de engorda y en grandes ranchos lecheros son los que tienen mayor presencia en el mercado ya que tienen mayor capital destinado a la inversión en tecnología lo que pone en clara desventaja a los pequeños y medianos productores que dependen de los mercados locales o regionales y que hoy en día pasan por un trecho muy complicado basándonos en las presiones inflacionarias y las ineficientes políticas públicas que no les dan una certeza favorable para el futuro de sus unidades de producción.
Los pequeños y medianos establos lecheros del país fan en franco declive ya que los precios de los insumos necesarios para producir un litro de leche han ido en aumento desde el 2018 mientras los precios no han tenido incrementos sustanciales que favorezcan sus finanzas y con ello su capacidad de operación, recientemente circuló en redes sociales un video de un grupo de productores lecheros del estado de Jalisco en donde al exponer sus necesidades también coincidieron que si las cosas no cambian van a desaparecer pero… si hay alternativas para mejorar sus condiciones a corto, mediano y largo plazo? La respuesta debería ser si pero no recibieron un sí, recibieron un tal vez y eso ya sabemos cómo termina, esto nos lleva a reforzar más la idea que los establos lecheros deben comenzar a producir carne, por inútil que parezca esta puede ser la alternativa que los ayude a mejorar sus finanzas y así lo pienso, lo detallo y comienzo a pensar que es posible y que la filosofía de la Ganadería Regenerativa debe expandirse más allá de los sistemas de pastoreo, ya que en la búsqueda de reducir el impacto ambiental también es importante no perder fuentes de ingreso para las familias que dependen del ganado.
Entonces entra ahí una frase que nos lleva a movernos “EL ÉXITO ESTA DETRÁS DE CONVERTIR UNA IDEA EN UN MECANISMO”.
Históricamente se dividió la producción en ganado de leche y ganado de carne, surgiendo así la especialización de ciertas regiones del país en una actividad y en otra, en algunas excepciones se logró consolidar ambas, a diferencia de los grandes corporativos, los pequeños y medianos establos lecheros no tienen en su mayoría acceso a fuentes de información que les faciliten acceso al conocimiento sobre nuevas formas de producción y con ello mejorar los procesos que llevan a cabo en sus corrales, hay grandes empresas de genética que operan a través de distribuidores a lo largo y ancho del país, con genética de clase mundial, que está al alcance de todos pero a la que no todos tienen acceso por diferentes circunstancias que pueden ser económicas pero que también encontramos resistencia al cambio por falta de conocimiento e información, esto complica un poco más la idea.
Entonces nos volvemos a preguntar, ¿un establo lechero es capaz de producir carne? Y volvemos a responder si, sin embargo, muchos vendedores de genética congelada no coinciden con esta idea pues para ellos un establo lechero solo debe enfocarse en producir ganado lechero para no desviarse de su objetivo principal, la leche, en estricto sentido de acuerdo a la literatura y a la práctica, es correcta esa afirmación siempre y cuando todos los productores tuvieran igualdad de condiciones en cuanto disponibilidad de capital económico y humano, dado que lo anterior no es posible ni real lo que hace importante replantear la forma de producción en pequeños y medianos establos, no de forma descontrolada y sin información, si no con planteamientos que sugieren un manejo controlado de la producción a través de un programa de reproducción.
En diferentes medios de comunicación, digitales y escritos además de redes sociales existen muchos testimonios de la realidad actual de los pequeños y medianos establos lecheros refiriendo que producir leche ha dejado de ser negocio pero no renuncian ni tiran la toalla porque les gusta su trabajo o porque no tienen otra alternativa, si bien el mercado del ganado de carne está creciendo tenemos un espacio para cubrir esa necesidad del mercado aprovechando los vientres disponibles en los establos lecheros realizando un análisis que nos permita diseñar un plan de acción que no suplante el principal objetivo que es producir leche pero que si complemente los ingresos cíclicos o anuales produciendo carne.
Con lo anterior no proponemos que los productores tengan que sacar el ganado que actualmente hay en sus corrales para introducir razas de doble propósito, ni tampoco pretendemos decir que hay que desarrollar razas nuevas de doble propósito, lo que el presente trabajo plantea es hacer que las unidades de producción se conviertan en unidades de doble propósito a fin de diversificar sus ingresos y mejorar el flujo de efectivo.
Tomando en cuenta una formula básica de estadística, el famoso 80-20 nos puede ayudar a determinar una estrategia de integración de razas cárnicas en establos lecheros, esta fórmula no es una formula general, debe ser considerada como un método flexible y de mejora continua de acuerdo a las características de cada unidad de producción en relación a lo que los productores quieran lograr.
El 80-20 que propone este texto significa que el 80% de las vacas serán inseminadas con semen de carne y el 20% restante con semen sexado buscando generar los reemplazos que aseguren la producción de leche, las vacas inseminadas con semen de carne deberán ser las vacas menos sobre salientes y las vacas destinadas a producir reemplazos serán el top de vacas sobresalientes en producción mismas que deberán ser inseminadas jóvenes dado que se sugiere que en sus 3 primeros partos aseguramos una progenie sana y con menos tiempo para iniciar la producción.
Lo anterior nos da algunas soluciones para problemas comunes en los establos y también en el impacto ambiental, en los establos evitaremos sobrepoblación de terneras de reemplazo que a como está el mercado nacional difícilmente son colocadas a buen precio, mejoraremos los precios de los becerros de descarte hasta en un 50% más por becerro al destete que es la edad en la que sería más rentable su venta, actualmente la mayoría de productores venden los becerros a los 3 días de edad o los que llamamos calostreados, llevar un buen programa de reproducción y una buena planeación en la cosecha o adquisición de insumos ayudaremos a mejorar los ingresos del productor, ahorrando y promoviendo ingresos adicionales por la venta de becerros para la engorda.
Vacas longevas y sanas es lo que nos ayudara a dar un respiro al planeta, esto también nos da un aliciente para la propuesta 80-20, si vamos a tener vacas dentro del establo por más tiempo no tendremos necesidad de tener excedentes de reemplazos, lo que se traduce en que tendremos más vacas y menos bocas por lo tanto también destinaremos menos recursos como combustibles para el manejo dándose así un ahorro adicional al reducir costos que a la postre serán ingresos.
Llevar a cabo esta propuesta es más complejo que escribirla, pues el objetivó principal de este trabajo es mejorar las condiciones operativas y financieras de los productores pero también este esfuerzo debe permitir equipar a los establos para reducir su impacto ambiental a través de dotarlos de celdas solares para los techos, instalaciones para captación de agua de lluvia que se pueda destinar en los procesos de limpieza de los corrales, que normalmente se hacen con agua potable, promover la cultura del compostaje que también se puede convertir en un ingreso adicional al producir composta, bioles y más derivados de manejo del estiércol, producción de biogás para ser usado en las cunas de recría con lámparas de calor y para más procesos que se llevan a cabo dentro de los establos, nosotros le llamamos establos verdes y no deberían ser exclusivos de los grandes corporativos, sin embargo hacer realidad esta idea requiere de la voluntad política de los organismos públicos y privados interesados en mejorar la calidad de vida de las personas y en garantizar el bienestar animal.
No se puede mejorar lo que no se puede medir y es importante por ejemplo, saber cuánta energía se requiere para el funcionamiento de los ventiladores usados durante el verano para mitigar los efectos del calor en las vacas, cuantos litros de agua se emplean en la limpieza de las instalaciones para determinar cuántos m3 de agua requerimos captar para asegurar los procesos durante un ciclo, saber cuánto gas requerimos para las cunas de recría y así determinar el monto de la inversiones que serán variables y determinadas por el tamaño en cabezas y en m2 de la unidad de producción.
En la cuestión reproductiva, tomando en cuenta la demanda del mercado se sugiere el uso de razas cárnicas como el Angus, el charoláis, el hereford o sus cruzas ya muy comunes en otras latitudes como lo son el limoangus o el black baldy, ¿porque sugerimos eso? La calidad de carne del Angus es tan especial que es de las más demandadas y con buenos precios en el mercado, mientras una Holstein la estamos inseminando entre los 12-13 meses de edad las Angus están llegando a edad reproductiva casi al mismo tiempo y como sabemos el marmoleo de la carne del Angus es el más acelerado respecto de otras razas por lo que esta cruza nos ayuda trazar que el efecto del vigor hibrido nos dará mejor calidad del canal y mejor calidad en la carne de los becerros producto de esta cruza, sin embargo tenemos más alternativas que también nos dan ideas de los resultados que podemos obtener con fines de incursionar en el mercado del ganado de la carne.
Con todo lo expuesto en los párrafos anteriores la Ganadería Regenerativa tiene un espacio para ampliar su concepto y que este sea más notorio en los sistemas de producción, al saber que cada hectárea que se suma a la explotación agrícola o ganadera pone en riesgo el ya frágil ecosistema global debemos aceptar que necesitamos replantear la idea y los objetivos de la producción ganadera de una forma más responsable sobre el futuro.
Si en la pradera estamos buscando mejorar la rentabilidad a través de la rotación del pastoreo en los corrales debemos buscar la rentabilidad a partir de aprovechar la capacidad instalada que existe y que no debe quedar abandonada y convertirse en una estadística más que genera más migración del campo a la ciudad en busca de oportunidades que en realidad no existen pues cada vez caben menos personas en las ciudades.
¿Que impide que la actividad agropecuaria en México sea rentable o no para quien se dedica a ello? La respuesta en sencilla, la falta de acceso a la información, la falta de capacitación y también la falta de interés por parte de productores y por parte de las autoridades responsables en esta parte de la economía.
Hablar palabras técnicas como metodología, estadísticas, métricas, etc.; en ocasiones genera desconfianza en los productores pues muchas veces no conocen el significado por lo tanto invitarlos a desarrollar un programa de mejoramiento genético lo ven como algo demasiado complejo y poco útil por lo que deciden seguir cubriendo las vacas con el torito del vecino, un protocolo para tandeo de vacas lo ven muy costoso, sin embargo tandear la cantidad de vacas por lotes nos va a permitir tener vacas con picos altos y bajos de producción de forma simultanea por lo que diseñar el programa de reproducción debe incluir los lotes que van a respaldar al productor para enfrentar los picos bajos de producción y en estos casos el término “Menos es Más” debe ser considerado como un aliado al momento de plantear la idea a los productores.
Con lo anterior también tenemos la experiencia que algunos médicos veterinarios se rehúsan a orientar al productor a cómo llevar un planeación, reprueban la idea de un Establo Lechero produciendo carne y en otros casos los productores ven poco rentable inseminar una vaca por que el veterinario recomendado les cobra demasiado caro porque inseminar una sola vaca no les conviene, de ahí que el acceso a la información sea prioridad con fines de despertar el interés y evitar que se abandonen las pequeñas y medianas unidades de producción lechera.
Hoy en día el 98% de mexicanos posee un teléfono celular y la gran mayoría de ellos son teléfonos inteligentes con acceso a internet, sin embargo muchos usuarios ganaderos desconocen donde buscar y encontrar información que les ayude a tomar mejores decisiones en su propio beneficio por lo que otra de las vertientes de la Ganadería Regenerativa se debería considerar, la creación o desarrollo de canales de información a través de simplificar literatura a fin de que sea entendible para el ganadero, diccionarios de sinónimos o lenguaje coloquial con lo que en comunidades apartadas usan para referirse a una condición física o clínica del ganado.
Desarrollar herramientas que les permitan llevar registros que después se puedan medir es otra opción que se debe considerar hacer llegar a los productores, como sacar sus promedios de producción, sus líneas de tiempo para saber cuándo hacer sus manejos sanitarios y cuando los reproductivos y como relacionar los unos con los otros basados en los flujos de efectivo que cuentan y así generar una planeación que debe tener una visión de 30 meses antes y 30 meses después, es decir lo que hicimos hoy lo veremos reflejado en 30 meses por lo que en 30 meses sabremos si la decisión que tomamos hace 30 meses valió la pena.
Tomar el estandarte de la ganadería regenerativa es afrontar los retos que vienen detrás de cada decisión que se tome a fin de reducir el tamaño de la huella del ganado en ambiente.
El mundo se ha detenido principalmente las ciudades más importantes cuando hay escasez de combustibles o de energía eléctrica, ¿se imaginan que pasara cuando la escasez de alimentos se haga presente en esas mismas ciudades? De ahí que aquellos que estamos dentro de la actividad ganadera aportemos conocimiento, tiempo y esfuerzo en crear conciencia en lo que estamos haciendo ya que esto mejorara la calidad de vida de nuestras familias y también de las familias que dependen de lo que hacemos.
Si bien es cierto que históricamente las inversiones en el sector agropecuario son de alto riesgo hoy en día el riesgo es aún más grande y más demandante pero también más gratificante pues tenemos el reto de cubrir la demanda de mercados locales y regionales, con carne y leche además de sus derivados.
Desde la conquista hasta el México de los años 70´s el sector agropecuario era protagonista en nuestra balanza comercial pues teníamos aun bastantes tierras cultivables y ganado lo que permitía que el efecto de la inflación no fuera tan evidente, sin embargo la modernización del país ha ido mermando al sector.
La necesidad de rescatar a los pequeños y medianos productores es sin duda una de las apuestas más retadoras pues cada unidad de negocio representa en su mayoría el sustento de la familia del productor y de las familias de sus colaboradores según sea el caso por lo que perder un pequeño establo es perder una fuente de empleo que genera economía, misma que se ve reflejada en la recaudación fiscal y que financia los proyectos de desarrollo de otros sectores, algunos de ellos innecesarios.
La ganadería mexicana hoy depende del exterior para asegurar los insumos y también para determinar los precios de lo que se produce pero esto pudiera reducirse considerablemente, si se desarrollan políticas públicas que incentiven la producción, sin necesidad de apoyos directos pero si con incentivos fiscales, simplificación de tramites burocráticos que entorpecen la movilidad del ganado, sin duda la globalización está en todos lados y afecta de manera positiva o negativa según sea el ciclo a productores y consumidores, si la premisa es producir más con menos, lo que ya tenemos disponible en corrales y las inversiones en zonas, núcleos o franjas de cultivo de los principales insumos para la demanda ganadera permitiría a los ganaderos depender menos del exterior y poder tener más capacidad de reacción para anticiparse a los efectos de las crisis globales.
Este trabajo presenta en forma general alternativas que generen mejores condiciones de producción y con ello la calidad de vida de pequeños y medianos productores de leche mexicanos.
Es al momento una idea basada en la tendencia global en la búsqueda de hacer eficiente la producción de alimentos promoviendo siempre el bienestar animal.
Cito algunas frases de la famosa y grandiosa Temple Grandin:
Podemos citar muchas más, sin embargo estas dos fueron un motivo especial de mostrar que es más importante considerar lo que podemos hacer en cada región y establo del país para hacer que nuestra ganadería sea mejor desde la base hasta la punta de la pirámide, es un sistema vivo y dinámico por lo que los cambios deben ser previstos y ejecutados de forma controlada pues son inminentes sin importar si estamos listos o no.
Agradecemos a los pequeños productores que nos permitieron acceder a la informacion disponeble sobre sus unidades de produccion para poder realizar el presente trabajo y con ello poder mostrar la importancia de todos los protagonistas en el sector ganadero sin importar si son micros, pequeños o medianos, grandes o gigantes, las alternativas se puedeen ajustar para cada sistema, hay que dejar de ver a la ganaderia como una estricta secuencia de conceptos, la rigidez no funciona en organismos vivos.
Bibliografia